Y HASTA AHORA SE SABE…

¿Saben qué paso?

Me sumergí en acuarelas, que por poco me quedo  toda la vida con ellas. 
Pero ya saben que por naturaleza el ser humano siempre “quiere más”, así que las despedí hasta nuevo aviso.

Cada quien tiene el derecho a una vida propia, y puede malgastar su tiempo como quiera y con quien pueda.

Es muy simple. Tienes todo el derecho. ¿No te parece?

A veces…

Algunas personas carecen de opinión alguna.  Sobre las cosas que se encuentran justo ante sus ojos (y no es porque sean cortos de vista) huyen por no dar una opinión propia, cuando sienten que se  formará una opinión sobre algo que no son capaces de defender.

Y toman opiniones prestadas, para así no molestar a nadie.

Lo que acabo de escribir no me hace valiente, yo lo admito, soy cobarde.

Pero lo que intento decir es que disfracemos la cobardía, aunque sea por unas horas.

Seamos pacientes, la metamorfosis es un poco larga.

Quizás mis convicciones no sean tan profundas, pero pienso que para todo cambio se necesita un buen tiempo.

Es mejor así, que ser superficiales de pensamiento. Con  esto me refiero a personas que creen que, estar libre de  cargas siempre es un gran punto a su favor.

Personas que no tienen ni la más mínima gana de proteger a alguien, que solo intentar dar un intento “falso” de pelea, que solo saben  atacar “por detrás” para dejar fuera al contrincante.

Personas que intentan ser un camaleón intelectual. Cambiando de color según el color del enemigo, gritando su lógica más efectiva para cada situación.

Se defienden con palabras como, “Si no lo entiendes, es problema tuyo”.

Pero para mí, si se me permite decirlo, no es más que un simple juego de cobardía.

Para algunos la coherencia es algo imprescindible, pero debo decirles que para alguien incoherente eso es totalmente irrelevante.

Es mejor decir algo incoherente, que tener que aparentar alguien intelectual con lógica barata y al final no tener ningún argumento verdadero.

No es bueno que te digan que tienes la razón, es mejor que discrepen contigo.